En “Loewe Lamps”, el brutalismo se encuentra con la poesía en Milán

Cultura

Publicado por Javier

En “Loewe Lamps”, el brutalismo se encuentra con la poesía en Milán

En la Semana del Diseño de Milán 2024, Loewe presentó una exposición de obras basadas en la luz recientemente encargadas bajo el modesto título, Lámparas LoeweLa muestra, para 24 personas, se realizó en un búnker industrial diseñado por James Stirling, oculto bajo el elegante Palazzo Citterio del siglo XVIII. La yuxtaposición de estas dos cualidades espaciales (el palacio hiperburgués y su exuberante jardín, y el búnker esencial de aspecto brutalista) funcionó bien arquitectónicamente y proyectó la exposición hacia una especie de canon de bellas artes, algo que suele ser difícil de encontrar en todas las iniciativas del Salone Del Mobile.

Lámparas Loewe

Mientras bajaba las escaleras de hormigón que conducían a la exposición, me encontré con Enrico David, un artista italiano afincado en Londres que, junto con Chiara Fumai y Liliana Moro, representó a Italia en la Bienal de Venecia de 2019 y presentó una lámpara de mesa curva de ónix para la exposición de Loewe. “Ya había estado haciendo esta lámpara, así que cuando Loewe me pidió que participara, me pareció adecuado”, me dijo. “Como escultores, nos movemos en este ámbito de objetos que aparentemente no tienen ninguna función, pero luego me di cuenta de que, durante los últimos 25 años, también he estado haciendo lámparas, por lo que la funcionalidad es algo que incorporo a mi trabajo”.

Lámparas Loewe

Para el artista japonés Genta Ishizuka, el tema de la luz lo motivó a crear una lámpara colgante. “He utilizado tubos de aluminio para aire acondicionado de tiendas de bricolaje y he hecho un nudo con ellos”, me dijo. La laca japonesa cubre la pieza, en el negro tradicional, mientras que las luces que surgen de esta superficie oscura sirven como antítesis de su forma. De manera similar, la artista belga Ann Van Hoey se centró en la materialidad, utilizando el cuero como componente principal de su pieza, aunque ella es ceramista. En colaboración con Loewe, transformó cuencos que había producido previamente en arcilla en un ramo de cuero suspendido.


Mientras caminaba por la exposición, me encontré con la obra de Álvaro Barrington, que combina luz, aluminio y pintura para representar la fachada de una tienda. ¿Es una escultura? ¿Es una lámpara? ¿A quién le importa? Para el artista afincado en Londres, la contraventana es un elemento recurrente en su práctica, sobre todo porque en Nueva York, de donde es originario, las tiendas con fachadas juegan un papel importante en el contexto social de la ciudad. “Recuerdo que, de niño, cuando salía un álbum, tenías que ir a la tienda y esperar a que subiera la contraventana”, me dijo. “Siempre lo pensé como un momento de luz, una oportunidad”. El libro de John Dewey El arte como experiencia surgió como uno de sus títulos favoritos, y estoy de acuerdo. Si la Semana del Diseño demuestra algo, es que, como dice Barrington, “un producto bellamente diseñado puede ser tan poético como una pintura”.